Uno, DOS y TRES... CONTRA LA PARED

Todo empezó con una llamada a última hora y el envío de varios sms intentando recabar ciclistas. La asistencia fue mínima, Anxo y Javi a las 18:00 en el puente. Como siempre la ruta sin definir, y como siempre en pocos minutos llegamos a acuerdo = TRES PICOS.

La ruta se planteaba tranquila y fuimos directos por carretera a ritmo de diálogo. Bla, bla, bla llegamos a Bastavales para ir por el camino del gas para enseñarle a Anxo el paso de un riachuelo.

Volvemos a la carretera, pasamos el cruce temerariamente y nos pusimos a subir.
La subida tranquila, a la par, en mediana, con calor y bla bla bla comentando cual sería el título de la vuelta de hoy (curiosamente ambos íbamos pensando lo mismo). Después de pasar las curvas y enfilar hacia el primero Anxo sugiere: "hoy no paramos en el primero, vamos re-enganche". Y así fue, non stop y parriba¡.
Otra vez al pasar las curvas Javi sugiere: "y si subimos también al segundo". Y así fue, comprobamos que la subida era difícil obligando poner pie al suelo y a empujar un poco de la bici. Arriba del tan poco visitado segundo paramos a una breve sesión fotográfica. Tras las fotos nos dirigimos al tercero, impresionantes vistas del tercero desde el segundo que merecían otra sesión fotográfica. Aquí nos vino a la memoria un vídeo grabado, creo que en blanco y negro, de nuestras primeras subidas a estes montes, ande andará el vídeo?????.
Bajamos por una interminable trialera llena de piedras para llegar al mítica subida del tercero. El objetivo el mismo, no poner pie en tierra. Mal empezamos, por una zona plagada de piedras redondeadas llega el primer pie de ambos: oh my god¡¡¡ Bueno, hay que seguir aunque el objetivo no se vuelve a conseguir. Aún quedaba por llegar la pared, la insubible pared. Pero, esta vez, a pesar de subir a ritmo, subir al segundo, tener un día super relajado,... ta chan ta chan,...¡¡¡........
Señores y señoras, ANXO CONSIGUE SUBIR LO INSUBIBLE, LO IMPOSIBLE DURANTE AÑOS, EL MITO DEL PARED,.... No creía lo que estaba viendo, ya estaba arriba, esta vez la pared ha perdido,... increíble pero cierto. ENHORABUENA¡¡¡¡ Estos momentos de alegría son los que valen la pena, ya tenemos tema para todo el día o años.

Con los ánimos renovados seguimos para coronar, un poco más de trial por el medio de las rocas, ahora Anxo ya se plantea subir por cualquier sitio, para llegar al alto de los tres picos. OBJETIVOS CONSEGUIDOS con buena nota y un nuevo mito caído¡¡¡¡.
Bajamos sobre nuestros pasos, parando en la antes conocida como pared insubible para analizar la proeza. Ninguno de los dos lo entiende, el camino es empinado, llenos de piedras, no hay trazada buena,... la única explicación posible es haber pasado volando por allí. Sesión de fotos para el recuerdo y seguimos bajando.
Pasada la bajada del tercer pico llegan las buena bajada. La primera curva a derechas para mí, en la siguiente curva de izquierdas me temo lo peor. Es la especialidad de Anxo y ya noto una sombra llegar por el rabillo del ojo, unas voces "cuidado, cuidado, aparta". Entraba pasadísimo, haciendo un recto. Uf, menos mal que aparté a tiempo y el consiguió frenar a tiempo. Toliño¡¡¡
Ahora bajamos por el otro lado del primer pico, sabiendo que la bajada esta impresionante. Vamos bajando, Anxo no recordaba unas curvas antes de la larga bajada y no hubo mucho pique. Eso si, se volvió a marcar otro recto sin consecuencias. Pero en que andas pensando? La tierra suelta hoy conseguía descontrolar a la Sun. Como el dijo "parece que soltaron unas canicas por aquí".
Llega la larga bajada sin forzar demasiado, con el pensamiento en las curvas del final y en las canicas. Anxo me deja ir delante para darle más emoción. Llegan las curvas, pongo en funcionamiento la cámara trasera para ver por donde viene este. Je je, mis trazadas cerrando hueco lo desesperaron y no hubo adelantamiento (ni accidente).
Seguimos bajando sin más piques, a la par, comentando las incidencias, hasta llegar al vía del tren. No aseguramos bien de la no llegada del tren y cruzamos. En dos segundos le cambia el chip a Anxo, hace que cambie el mio y volvemos a retomar las locas bajadas por el pueblo. El delante, haciendo unos derrapes a pie fuera para despertar a todo el pueblo. Espectacular bajada, tan espectacular como temeraria.
Paramos en la fuente a calmar las tensiones. Volvemos sobre nuestros pasos para desviarnos por la ruta llana en dirección a los callos del cruceiro. Esta vez no había callos pero si mejillones. Tras comprobar que ya eran las 9 de la noche no nos entretuvimos demasiado y volvemos para casa tras un día que se planteaba tranquilo que la final acabó con un mito y 30 kms.